Tras golpearse fuertemente la cabeza contra el dintel de una puerta en su residencia del 7740 de Mullholland Drive, Errol Leslie Thomson Flynn despertó a la mañana siguiente hablando en fluido japonés, idioma que desconocía hasta la fecha.
Este curioso fenómeno, conocido como xenoglosia consciente o recitativa, traía de cabeza a su entonces esposa Lili Damita, y a todo el personal de servicio de la mansión.
Después de tan memorable episodio, Flynn se enclaustró en su despacho durante varias semanas, del que sólo salió una luminosa tarde de domingo, con la cara embadurnada de betún, para podar los rododendros de su jardín. Tras declararse satisfecho, regresó al interior de la casa para enfrascarse en la lectura de unos delicados haikus del siglo XVII.
Durante su aislamiento, Flynn inició la redacción de una novela de la que únicamente se conserva el título, House Of Ill Repute, y el primer capítulo, que comienza así:
“Cuando las mujeres detectan la soledad de un hombre, salen huyendo. Pero cuando sienten que hay otras mujeres, esto las excita”.
Mujeriego incorregible, hombre arrojado como pocos, padeció la disentería, la tuberculosis, y contrajo varias enfermedades venéreas. Quién sabe cuál fue la razón que le condujo al desastre.
Ella fue la víctima. Encontraron el cuerpo exangüe de Lili junto a la piscina con una espada wakizashi clavada en el bajo vientre. Estaba hundida hasta la empuñadura.
El escándalo fue mayúsculo.
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